Reseña 'Los Señores de los Siete Tronos: Holocausto' de Carlos González Sosa

¡Nueva reseña que llega! Que bien, mi meta era entregar reseña nueva en el blog antes de los días claves de Semana Santa ya que voy a tener menos tiempo para leer y lo he logrado. El libro que he estado leyendo en estos últimos días y del cual os vengo a hablar es de una segunda parte de una serie de libros de fantasía escritos por autor nacional, Los Señores de los Siete Tronos: Holocausto. El primer libro me dijo poco, sinceramente, y con este no las tenía del todo conmigo misma. Por un lado tenía esperanzas porque el primer libro no acabó mal, nos dio alguna pista sobre aquellos que encontraríamos aquí, pero después de ver lo lento que se me hizo el primero pensaba que este iba a ser igual. Que equivocada estaba. Este libro me ha gustado más y lo he cogido con ganas al final ya que me ha dejado una sensación mucho más buena en el cuerpo que el libro anterior. He tardado menos en acabarlo y, al final, voy a tener hasta que pedir tercera parte cuando esta serie se compone solamente de dos volúmenes. E. fin, que si queréis saber más sobre mi opinión, abajo la encontraréis, como siempre:

AVISO: Si sigues leyendo puedes encontrar spoilers del libro anterior.

Título: Los Señores de los Siete Tronos. Holocausto
Trilogía/Saga: No. Dos volúmenes.

Autor: Carlos González Sosa

Editorial: Roca Editorial

Páginas: 320

Precio: 16,90€

ISBN: 9788499189215

SINOPSIS: Dorken, el hechicero, regresa del mundo de los dioses sin haber conseguido su objetivo. Había cruzado la puerta que une los dos mundos con el fin de buscar la clemencia de los Siete Señores. Pero los dioses ya habían tomado su decisión: castigar a los humanos. Una vez en nuestro mundo, Dorken busca a Leigel, a quien había pedido que protegiera a su familia, pero los Ancianos de la raza le dicen que Leigel es un maldito, y ya no es un miembro de los suyos. Desesperado por la noticia de la desaparición de su hijo, Dorken baja al submundo en busca de un pacto: entregará su alma a cambio del dragón Nazrée, el único ser con el que podrá vengar a su familia. Holocausto es la trepidante continuación de esta nueva serie fantástica que conquistará a los más jóvenes lectores de Patrick Rothfuss, J.R.R. Tolkien y George R.R. Martin.

Creo que por fin he entendido la dinámica de este libro, al menos eso creo. Y más vale tarde que nuca, ¿verdad? Es decir, cuando hace unos meses me dispuse a leer la primera parte la cogí con ganas porque comparan a estos libros y al autor con Patrick Rothfuss, George R.R. Martin y JRR Tolkien, tres grandes de la literatura fantástica, por lo que el libro no podía pintar mejor. Pero me llevé un chasco al ver que tenía un ritmo pausado y, muchas veces, no entendía ese cambio tan multitudinario de escenas, algunas las cuales no aportaban nada interesante. Hasta hora. Después de leerme el segundo libro tengo que decir que, y vuelvo a hablar desde la creencia, González Sosa bebe de los tres autores mencionados antes pero desde una perspectiva más cinematográfica. Cuando leía esta segunda parte mi cabeza empezaba a formar escenas y completaba una película que ya si me gustaba mucho más. Ese cambio de escenas cobraban sentido, lo veía claramente y seguramente haya sido gracias a eso que Holocausto me ha parecido una lectura mucho más entretenida, más rápida y más rápida que el libro anterior, haciendo que ese sabor amargo que tenía haya desaparecido por completo.

Después de que el hechicero Dorken abriera la puerta que lo conducía hasta el mundo de los dioses que mantenían el orden en su mundo hasta que estos decidieron acabar con la raza humana, una gran batalla por el poder de estas tierras está a punto de empezar. Vendiendo su alma, Dorken tiene ahora un poder que podría suponer la gran ventaja que la humanidad necesita para resistir a este embiste que se llevará miles de vidas. Mientras tanto, en la gran ciudad llamada Výliareth, una serie de planes se van a alzar para intentar buscar más oportunidades y otras ventajas. Leigel, el elfo que fue desterrado de su tierra y de su propia sangre, tiene que partir de nuevo hacia ese lugar donde fue condenado para intentar encontrar a los Ancianos y usarlos como baza. Por otro lado, el rey de Výliareth, Torke, quiere que los demás reinos humanos se unan para crear una fuerza mucho más mayor, pero parece ser que el rey Ménlar de Luthon será un palo mucho más duro de torcer. Dorken es el encargado de convencerlo, pero cuando se da cuenta de que el rey busca algo más que una simple alianza, el hechicero no tendrá otra oportunidad que usar su última baza: entregarle la mano de la futura reina de Výliareth, la joven Laj. Luthon tiene problemas de sucesión, no hay nadie si el rey muere y esa podría ser la salvación del reino. Laj comprende que es una oportunidad que deberá de cumplir por mucho que le duela y por mucho que su corazón le pertenezca a otro hombre. Sin embargo, los enviados de los Siete son cada vez más poderosos, arrasando aldeas y ciudades completamente, manchando los vastos prados con sangre humana. ¿Podrá una unión tan fuerte placar la ira de los dioses y detener la extinción de la humanidad?

Carlos González Sosa vuelve a la carga en esta segunda parte con mucho más voltaje que la anterior, bebiendo de clásicos de la literatura fantástica introduciendo esos seres tan característicos como son los orcos, los elfos, los enanos y los humanos, añadiendo también sus propios toques llenos de originalidad para ver como la humanidad tiene que hacer frente a su destino y no caer y desaparecer para siempre. Al igual que pasó con Los Señores de los Siete Tronos: La Puerta, este libro está narrado en tercera persona cambiando en todo momento la visión entre los diferentes personajes, para poder ubicarnos en diferentes escenarios y hacer que la trama sea mucho más llevadera y no nos podamos quedar estancados en un solo sitio, pecando probablemente de pesadez o monotonía. En Holocausto hay cabida para todo, para esa futura guerra que está a punto de empezar, viendo como las ideas van surgiendo, los planes se van llevando a cabo y la preparación es extrema al igual que momentos que nos introducen de lleno en esa vida de castillos y problemas de rey y reyes que tan típicos son en esta época en la que todo está ambientado. Aunque al principio he dicho que esta segunda parte me ha parecido mucho más llevadera que el primer libro si es cierto que he tenido momentos durante la lectura que me pausaban demasiado. Me explico. La parte donde esta batalla que enfrentará a orcos, elfos y los enviados de los siete contra la humanidad se leía rápidamente, había mucha acción, mucha sangre derramándose y mucho movimiento de espadas u otras armas. En esos momentos yo he estado muy concentrada en lo que leía, no queriendo perder detalle de lo que pasaba porque me lo estaba pasando bien, la trama era bastante fluida y entretenida, consiguiendo engancharme bastante bien. Pero luego el autor cambiaba todo eso por el interior del castillo, haciendo que toda esa emoción de antes parara abruptamente. No digo que las escenas de castillo hayan sido aburridas, a mi me han gustado también porque hay mucho juego entre los personajes, que si ahora tengo que esconder mis sentimientos, que si luego tengo que planear como hacer frente a lo que está a punto de venir y, sobre todo, un juego de traición, de amor y de amistad que a mi me ha seguido entreteniendo bastante. pero esa fluidez que notaba al principio ya no era tan destacada, la rapidez se había apagado un poco y muchas veces me ha costado más seguir porque no he estado tan enganchada como cuando aparecía la batalla.

Holocausto ha sido una mezcla de ambas sensaciones; por un lado me he encontrado totalmente sumergida a la historia cuando estaba delante de esa sanguinaria batalla. Siempre me han gustado esas escenas, quizás para la mayoría de vosotros esas escenas no son tan llamativas, pero a mi me gusta la acicón y cuando llegaba el turno en la que humanos empezaban a disparar flechas y a desgarrar carne, me lo pasaba bien. Y por otro lado están esos momentos más lentos, sin llegar a aburrir o a cansar, con los que también he disfrutado pero en menor medida. Entiendo que González Sosa tenga que meter momentos mucho más centrados en la sucesión del trono, en caracterizar más a sus personajes mostrándolos tal y como son o hablar de otros temas que no sean la batalla porque abusar tampoco es bueno. No se lo reprocho, ni mucho menos, hace una labor muy buena mezclando ambos ritmos, solo digo que han sido momentos más relajados que me han cortado alguna vez el rollo que tenía después de haber entrado en una batalla. Lo bueno es que en esos momentos también ha habido cabida para más de una sorpresa, no muy chocante pro si alguna que no esperaba y que ha dado una vuelta al final que me ha gustado bastante. 

Sin dudas, lo que más me ha gustado de este libro ha sido esa batalla que ansiaba ver en la primera parte porque sigo pensando que La Puerta se me quedó bastante floja, donde apenas ocurrían cosas que te atraparan. En Holocausto el autor da todo aquello que se había reservado en el primer libro, dejándome aquí mucho más satisfecha. Como ya digo, a mi meterme en todo este combate me encanta porque siempre me ha gustado la historia en ese aspecto, donde guerreros sacrificaban todo lo que tenían para poder hacerse un nombre en un futuro. No me ha sabido a poco, hay todo lo que estaba esperando y eso me ha agradado bastante, ha sido lo suficiente como para darme esa emoción que necesitaba. Después, también quiero destacar la oportunidad que nos da el autor de seguir conociendo más de la historia de todo este mundo que seguiremos descubriendo a medida que pasamos las páginas. En el primer volumen ya nos dio mucha información y aquí, aunque no en la misma cantidad, conocemos cosas nuevas que a mi me han gustado mucho. Conocemos más sobre el origen de las razas y de los humanos, las batallas que antiguamente tuvieron que librar y sabemos algo más de otras ciudades y de otras costumbres. Pero también me ha gustado conocer a los Enanos del mundo del autor, que no dista mucho de aquellos que ya he visto en otros libros pero teniendo estos una vida diferente. Yo siempre quiero conocer algo nuevo sobre seres que quizás estoy harta de vez y conozco más de sobra, pro cuando se me da la oportunidad de conocer un nuevo pueblo con sus características y gente siempre lo disfruto, así que conocer a estos enanos me ha gustado bastante.

Aquello que va a hacer que la nota final baje son los personajes. Hay muchos, muy diversos y cada uno con su propia personalidad y pensamiento. Movernos entre ellos ayuda bastante a asentarnos y no perdernos cuando cambiamos constantemente de perspectiva ya que queda bien claro quien es cada uno gracias a lo bien que esta construido cada una de esas personalidades, pero sigo sin tener una conexión cercana con ellos. Para mi siguen siendo planos, meros títeres para que la historia pueda ser llevada. No se les puede conocer en profundidad y es lo que mas me ha disgustado, porque lo bien que está esta segunda parte y no he empatizado con ninguno de los personajes. Eso no quiere decir que no me caigan bien unos y peor otros, solo que he echado de menos sentir esa conexión que numerosas veces he sentido con otros libros, de ahí que eso se me haya quedado en poco.

En mi opinión, la pluma de Carlos González Sosa ha mejorado. Me ha gustado su manera de describir, con palabras propias de la época y creando una ambientación asombrosa. Es palpable y yo se lo agradezco mucho, porque una trama como esta ambientada en un mundo así requiere mucha precisión a la hora de adentrarnos totalmente y el autor ha sabido hacerlo. A pesar de que me ha faltado profundidad en algunos aspecto, la trama se ha aligerado mucho por la fluidez y lo fácil que escribe una batalla de esas proporciones. El vocabulario no es solo de la época, sino también uno que en más de una ocasión requiere diccionario si no se está familiarizado con él. A pesar de eso, no hay confusión en ningún momentos muy fácil seguir las escenas y lo que él quiere dejarnos o decirnos, mezclando situaciones perfectamente para dejarnos de todo un poco.

Y aunque ya he hablado de los que me han parecido los personajes, tengo que hablar de cada uno de aquellos que más importantes me parecen. Dorken es un hombre que ha evolucionado bastante. Al principio lo veíamos como alguien que no entiende pero aquí, en esta segunda parte, ya es consciente de lo que hay. Es inteligente y sigue siendo muy bondadoso a pesar de que la ira le ciega. Hace actos que bien podrían hacerle ver como un temerario que no piensa antes de actuar, pero lo tiene todo muy bien planeado; Leigel es uno de mis personajes preferidos. Es un elfo que, a pesar de haber perdido sus orígenes, es muy fiel a sí mismo, haciendo aquello que él piensa debe de hacer sin sentir luego ninguna culpa interior. Ama con el corazón, lo da todo por aquellos a quienes aprecia o quiere, siendo un amigo muy leal para todo aquel que lo tenga; Laj es otro de los personajes que me han gustado mucho, una princesa de armas tomar. No es la típica que prefiere encerrarse en el castillo hasta que la tormenta haya pasado, Es guerrera y luchadora, protege a su pueblo con lo que sea y no tiene miedo de perder hasta su propia vida con tal de que los demás estén a salvo de esa extinción.

En definitiva, Los Señores de los Siete Tronos: Holocausto es una segunda parte que mejora su antecesora. Con mucha más acción, crueldad, más elfos, más orcos, más yark y más venganza, es un libro con el que se avanza mucho más rápido en su lectura y entretenido que nos deja más sobre este mudo que el autor ha creado mientras vemos esa ira que tienen los dioses junto a un miedo que provoca que la humanidad pueda extinguirse. Con una prosa muy fácil de seguir y muy coloquial, esta continuación supone el punto y final a una serie de libros de fantasía que todo amante de este género debería leer.

¡Muchas gracias a Roca Editorial por el envío del ejemplar!