Reseña 'The Raven Boys: La profecía del Cuervo' de Maggie Stiefvater

Cambiando de día, aquí os traigo la nueva reseña. No la he podido traer antes porque he estado algo ocupada, pero al menos he conseguido acabar el libro en el tiempo que yo quería y había establecido. El libro que traigo a reseñar hace algún tiempo que está en mi lista y, como pronto se publicará en España su segunda parte, he aprovechado para empezarlo y enlazarlo con el segundo libro sin perder detalles que podría haber perdido si lo hubiera leído antes. Os tengo que decir ya que me ha encantado, me ha dejado más que satisfecha y me ha presentado a una autora la cual pienso seguir más de cerca a partir de ahora. Como siempre, aquí os dejo los datos:

Título: The Raven Boys: La Profecía del Cuervo
Título original: The Raven Boys
Saga: Sí
Autor: Maggie Stiefvater
Editorial: SM
Páginas: 424
Precio: 14,95€
ISBN: 9788467563368

SINOPSIS: Cada año, la noche de San Marcos, Blue Sargent acompaña a su madre al camino de los espíritus para ver a los que morirán en los siguientes doce meses. Sin embargo, este año es distinto: Blue, la única de su familia que no tiene facultades adivinatorias, ha visto a uno de estos espíritus, y eso solo puede significar que es su amor verdadero o que lo va a matar. Él se llama Gansey y es el estudiante más rico del colegio privado más elitista de la zona, la Academia Aglionby, cuyo emblema es un cuervo que todos los estudiantes llevan bordado en el jersey. Junto a Adam, un estudiante brillante, celoso del poder económico de sus compañeros; Ronan, un chico con problemas emocionales desde la muerte de su padre, y Noah, el observador taciturno que apenas habla, forman los chicos del cuervo, y están empeñados en descubrir la ubicación de la tumba del último rey galés, Glendower, el Rey Cuervo. Blue sabe que debe mantenerse alejada de ellos, porque los chicos del cuervo siempre traen problemas. Aunque nunca podría imaginarse el siniestro y oscuro mundo que los rodea, donde la magia dejará de ser un juego para convertirse en una amenaza mortal.

Conocéis esa sensación de empezar un libro y quedarse totalmente enganchada y encantada con él, ¿verdad? Leer The Raven Boys ha sido justamente eso. Tengo que decir que al principio me ha costado un poco adentrarme y situarme en la historia, debido a que los primeros capítulos son muy intensos, donde Maggie ha decidido presentar a cada personaje, contándonos su historia actual y mencionando en casi todo momento sus recuerdos y vida pasada. Al tratarse de una tetralogía, el primer libro siempre estará para la introducción y poder establecer la base en la cual se asentará y desarrollará la trama en los libros siguientes. Por ello este libro se me ha hecho un pelín pesado y lento nada más empezarlo, pero cuando llega ese momento en el que nuestros protagonistas se juntan por primera vez y empiezan a interactuar entre ellos, todo cambia y mejora, sin dejar de mostrar más escenas del pasado, aunque no siendo tan frecuente como al principio. A partir de entonces, todo ha ido más rápido, he disfrutado y sentido mucho la lectura, he estado muy cómoda, ya no notaba tanto esa lentitud y pesadez sino que las páginas se me han pasado muy deprisa y sin apenas darme cuenta, gracias a la trama tan completa y fantástica que ha dado.

En The Raven Boys nos volvemos a encontrar con un tema que me encanta, el toque místico, la magia. Sin embargo, Maggie nos ha traído una magia que si bien he podido ver en pocos libros, no de la misma forma en la que ella la describe y la introduce en la trama. Me ha gustado mucho que le haya dado su toque personal a esta magia que se basa en el tarot, en la adivinación y en la clarividencia, que para nosotros no es exactamente magia pero que realmente está ahí aunque sea en un segundo plano. Ver como las cartas cobran vida y transmiten mensajes en la historia, aprender y conocer algún que otro ritual, que se pueda observar diversos accesorios en relación con ella y que aparezca algo llamado línea ley, de la cual surge ese personaje de Glendower, ha hecho que el argumento esté cargado de misterio, alguna que otra escena de acción, que tenga momentos de sorpresa y que sea un soplo de aire nuevo y de originalidad. Además, creo que Maggie ha sido bastante inteligente con respecto al tema sobrenatural ya que va tocando primeramente algunos puntos de esa magia y, luego, propulsa el tema, empieza a tener más protagonismo y cobra mucha más fuerza ya por el final. 

Otro de los puntos fuertes de este libro son los personajes que nos vamos a encontrar. Maggie ha escogido ir jugando con la perspectiva de varios personajes para narrar la historia y es una autora que ha estado constantemente modificando, puliendo y dando vida a cada uno de ellos, los cuales llegarán a ser fuertes, muy reales y bien caracterizados. Les da diferentes metas, pensamientos, vidas y consigue hacer que el grupo sea diverso. Que cada uno tenga lo suyo propio hace que todo tenga mucha profundidad, que el libro cobre mucha más grandeza y que sean importantes e imprescindibles para que éste no se quede flojo. 

Anteriormente no había podido degustar la escritura de esta autora, de lo cual me arrepiento mucho y, como ya he dicho antes, no pienso perderme o dejar de lado cualquiera de sus otros libros. Maggie pone pasión en lo que hace, es super detallista, se toma su tiempo a la hora de describir cada cosa que sale porque quiere que las cosas no se queden de manera superficial. Hacía mucho que no disfrutaba de una autora así, que tiene una pluma muy elegante, que es muy cercana al lector y que usa términos del día a día de un grupo de adolescentes. Creo que todo lector debería pasar por su escritura puesto que es una autora la cual se hace querer y que gusta en todos los sentidos.

Blue siempre ha estado rodeada de magia en su vida, pero ella no posee ningún don especial como lo tiene su madre o aquellas que están a su alrededor. Ella sirve únicamente como potenciador de energía para aquellas personas que se dedican a leer el futuro con sus cartas del tarot, aquellas que tienen el don de ver un futuro próximo y como potenciador de la misma magia. Durante la noche de San Marcos, noche en donde los espíritus de los que morirán en doce meses se pasean y la cual sirve para apuntar todos los nombres posibles, Blue ve por primera vez a un espectro. Pero al no tener esa habilidad solo puede significar una cosa: o es su amor verdadero o será ella quién lo mate. Ese chico es Gansey, un alumno de Aglionby y del cual Blue no quiere saber nada porque: uno, los chicos de Aglionby eran una calamidad y, dos, no estaba dispuesta a ser la causa de la muerte de nadie. A pesar de sus intentos, cuando Adam entra en su vida, también lo hace Gansey y sus otros dos amigos, los chicos del cuervo. Poco a poco se irá acercando más a ellos, los acompañará en sus pequeñas misiones de búsqueda y formará parte de la vida de cada uno de ellos sin saber que algo oscuro se está acercando.

Intentaré hablar de forma breve de los personajes que más relevancia han tenido. Empezando por Blue, es un personaje que me ha agradado y me ha dejado buenas sensaciones. A Blue ya la han avisado de que provocará la muerte de alguien si no anda con cuidado, por eso siempre anda viendo por donde pisa para no meter la pata. No quiere llegar a ser cercana de nadie, es una persona muy amable, inteligente y con los conocimientos suficientes para ser en más de una ocasión la líder de esas "misiones de reconocimiento". Luego tenemos a Gansey, que es el padre, por decirlo de alguna manera, de sus chicos cuervo. Hay dos tipos de Gansey, el obsesionado día y noche con Glendower, su profecía y su búsqueda, y el Glansey que se preocupa por los demás, aquel quien los protege, les da consejo, les ayuda y hace lo que sea, incluso sobornaría, para que Adam, Ronan y Noah sigan por el buen camino. Adam es el personaje que más me ha llegado de todos puesto que no tiene una vida fácil. Estudia en Aglionby no porque tenga infinidad de dinero, sino por una beca. Es muy cercano a Glansey, se podría decir que es como su hermano, y nunca dejará que el dinero de éste se entrometa en su vida. No quiere perder su esencia, todo lo que consiga tiene que ser porque él se lo ha trabajado y nadie ha intervenido. Su familia y casa no es como la de los demás, así que siempre intentará estar alejado de ella. Ronan es el chico cuervo más violento, no porque le guste, sino porque perdió a su padre y eso le afectó mucho. Es desobediente, pasa de las clases y de casi todo menos de su grupo de amigos. También se preocupa por ellos y defiendo a mano dura lo suyo. Por último, Noah, un chico que apenas se mostraba al principio y que acabará por sorprender y conseguir un papel algo más importante.

The Raven Boys: La Profecía del Cuervo es el inicio de una tetralogía que se caracteriza por ser la introducción a lo que vendrá y sucederá en los siguientes libros. Predominando las descripciones y teniendo una esencia misteriosa y mágica, es un libro que no te deja indiferente y el cual te deja ganas de continuar la historia.