Reseña 'Buscando a Alaska' de John Green

¡Lunes de reseña! Pues sí, para algunos una nueva semana ha comenzado desgraciadamente, lo que significa volver a tener que ir a clases. Pero a mi me gusta esta semana porque, ¡se acerca Halloween! y la que vamos a montar en mi pueblo va a ser inolvidable. Pero hoy también es día de subir nueva reseña al blog, a ver si a partir de ahora no me atraso más, así que aquí os dejo mi opinión de otro de los libros de John Green. Desde el estreno de la película de Bajo la Misma Estrella parece ser que la editorial ha querido aprovechar el boom, publicando todas las obras que ha escrito, hasta ahora, John Green en solitario. Buscando a Alaska es la nueva novela que nos llega del autor, aunque no es la más nueva. Cuando empiezo un libro de Green prefiero no leer otras opiniones porque ya me ha pasado eso de encontrar un montón de reseñas dispares en cuanto a pensamientos por lo que, para este libro, he querido ir con mi propia opinión del autor. Además, Buscando a Alaska es el libro que salió para leer en la primera Lectura Conjunta del blog y, más o menos, me hice una idea de cuanto me iba a gustar y que es lo que me iba a esperar. Afortunadamente, he acertado porque se trata de un libro el cual me ha gustado, pero tampoco es que me haya encantado. Os dejo sus datos a continuación antes de que sigáis leyendo más de mi opinión:

Título: Buscando a Alaska

Título Original: Looking for Alaska

Trilogía/Saga: No. autoconclusivo.
Autor: John Green
Editorial: Nube de Tinta
Páginas: 304
Precio: 14,95€

ISBN: 9788415594444

SINOPSIS: Antes: Miles ve cómo su vida transcurre sin emoción alguna. Su obsesión con memorizar las últimas palabras de personajes ilustres lo lleva a querer encontrar su Gran Quizá (como dijo François Rabelais justo antes de morir). Decide mudarse a Culver Creek, un internado fuera de lo común, donde disfrutará por primera vez de la libertad y conocerá a Alaska Young. La preciosa, descarada, fascinante y autodestructiva Alaska arrastrará a Miles a su mundo, lo empujará hacia el Gran Quizá y le robará el corazón... Después: Nada volverá a ser lo mismo.

Todo el mundo conoce, adora e incluso idolatra a este autor gracias a su novela Bajo la Misma Estrella. Pero, ¿qué pasa con sus demás obras? Son cuatro los libros que, con este, ya he leído sobre el autor y cada uno de ellos ha sido una grata experiencia además de encontrarme historias muy diferentes las unas de las otras. Buscando a Alaska no es solamente un libro más, es el libro con el cuál debutó en el panorama literario hace ya ocho años y el que nos trajo a John Green hasta el día de hoy y, vale, se muy bien que es difícil olvidar Bajo la Misma Estrella cuando estas delante de otros de sus libros, porque es el que más ha impresionado, el que mas ha marcado y el que más ha sido comentado, pero Buscando a Alaska es la primera joyita de este autor, en la cual no solos vemos sus primeros pasos, sino sus primeras reflexiones, sus primeras muestras de humor irónico, sus primeros personajes y su primera historia, con sus pros y sus contras. No, no es Bajo la Misma Estrella, pero es un libro igual de gratificante el cual te acaba atrapando quieras o no, cuya trama es inspiradora a la par que agradable, con una chispa de drama y un poco reveladora.

Miles es un chico que no tiene amigos en su instituto actual. Es alguien que pasa la mayor parte de su tiempo estudiando o descubriendo nuevas frases pre-mortem como afición que tiene. Sabe que su vida no tiene mucho sentido, por lo que está un poco perdido, y será gracias a las últimas palabras que dijo Rebelois: "Voy en busca de un gran quizás", cuando decida cambiar el chip y empezar una aventura que, es probable, le lleve a encontrar su gran quizás. Por ello decide cambiarse de centro de estudios para mudarse a Culver Creek, instituto donde estudió su padre cuando era joven. Pero él jamás esperaba encontrarse con una aventura tan excitante como la que va a vivir. Porque allí conoce al Coronel, un chico que le hará andar por caminos que nunca pensó recorrer, a Takumi, un chico que le hará ver lo importante que es la lealtad y la amistad. Pero sobre todo conocerá a Alaska Young, una chica que entra como un huracán en su vida para dejarlo todo patas arriba. Una chica que le volverá loco por sus cambios de humor constantes, una chica que le hará acercarse a un precipicio de sentimientos, una chica que le da nuevas experiencias y una chica enigmática a la cual no podrá resistirse. Pero cuando Miles está aprendiendo a ver cual es el sentido de vivir, algo fatal ocurre y su todo cambiará para siempre. Pérdida, dolor, arrepentimiento y rabia será lo que llegue a su cuerpo y, mientras intenta averiguar la verdad, irá madurando para responder a una única pregunta: ¿Cómo salimos de este laberinto?. Porque no, nadie le dijo que este camino, lleno de nuevas aventuras, iba a ser tan fácil de cruzar. Nadie le dijo que aprender a vivir iba a ser tan doloroso.

En Buscando a Alaska, John Green nos trae una historia de crecimiento personal y emocional, donde una de las misiones es encontrar el propósito por el cual vivimos y el poder disfrutar de los pequeños detalles, mientras se habla sobre la muerte con la cual nos desplazaremos para ver que es lo que somos realmente y en que nos convertiremos más allá de ella, todo desde una narrativa en primera persona a través de los ojos de Miles. Estamos de nuevo ante un libro que se divide claramente en dos partes: el antes y el después. A pesar de que se trata de la misma trama, he encontrado de nuevo un ritmo diferente de una parte a otra, siendo la del antes la que más enganchada me ha tenido. En ella empezamos una nueva vida, acompañando a Miles a descubrir nuevas emociones y experiencias mientras conoce a un grupo bastante variopinto y encuentra su primer amor. Es una parte que se caracteriza por tener mucha agilidad en la lectura, siendo esta la que ha conseguido atraparme en todo el libro y no soltarlo hasta haberlo terminado. Eso se debe, principalmente, a que el autor ha decidido dar también a la trama un toque de misterio tornando diferente la numeración de los capítulos, ya que en esta ocasión se tratará de una cuenta atrás basada en días. Mientras tenemos esas ganas de ver que es lo que pasará cuando el contador llegue a cero, Green nos regala de nuevo ese humor tan característico suyo con el cual me lo he pasado pipa, divirtiéndome y riéndome mientras iba leyendo al igual que momentos con estos personajes muy entrañables que no son nada fáciles de olvidar, ya que parecía que eras parte de este peculiar grupo de amigo. Con estos factores, esta primera parte está carente de aburrimiento, en la que tampoco encontraremos una lectura lenta, siendo la que más volando se me ha pasado, tanto, que cuando me quería dar cuenta ya estaba casi por la mitad del libro. Sin embargo, la parte que le precede no ha sido igual. ¿El motivo? Para entrar en el después ocurre algo que va a ser una jarra de agua fría, tanto para ti como para los protagonistas, y esto ha hecho que, tanto ellos como la trama, cambie a un tomo menos cálido. El humor que impregnaba las páginas anteriores no estará tan presente y la diversión deja paso a otro sentimiento que deja un sabor agridulce. Los pasos que damos en esta parte de la lectura serán más lentos e, incluso, se podrá notar un poco de monotonía ya que casi siempre estará ocurriendo lo mismo. Green sigue dando un toque de misterio a toda esta historia que nos envuelve, pero llega un momento en el que me he sentido un poco cansada de ver siempre lo mismo, resultándome incluso pesado. Hay cosas que se introducen que cambian un poco el ritmo, pero esta segunda parte se caracteriza por ello, por no ser una parte tan dinámica como la primera. Buscando a Alaska es un libro que puede absorberte desde su primera página pero el cual va decayendo a medida que se va avanzando debido a un suceso que cambiará la vida de todos. Tiene una parte en la cual caben la diversión, los momentos de descubrimientos, el de las nuevas amistades y el del amor pero, más tarde, todo eso se convierte en una búsqueda espiritual, muchos momentos reflexivos y más que un comedero de coco, cosa que le hace bajar el nivel a este libro.

No sé exactamente que es lo que más me ha gustado de este libro. Quizás en ver a un John Green primerizo, mirar como se defendía al principio con su primera historia, personajes y situaciones. Encontrarme con como era antes, como escribía y como reflexionaba me ha hecho conocerle un poco más y ha sido estado muy guay. También me ha gustado mucho la personalidad que le autor le ha otorgado a cada uno de estos personajes, haciendo que cada uno de ellos sean diferentes y que parezcan muy reales. Miles tiene una costumbre que es la de aprenderse todas las últimas frases que aquellas grandes personas de la humanidad dijeron justo antes de fallecer. Luego, Alaska es una chica muy extrovertida que le da mucho juego a la historia, con sus salidas o sus actos. Tiene un gran peso y me ha encantado que sea una chica la que lleve casi todo el cotarro.

Aquello que no me ha gustado es, como he mencionado arriba, la repetición de escenas a partir de la segunda mitad del libro. Creo que se le podría haber dado otra tuerca al argumento y no dejarlo siempre en lo mismo, Me ha parecido como si se quedaran muy atascado a partir de un momento, como si no hubiera avance en los hechos  y eso ha hecho que el libro ya no lo viera con los mismos ojos. Igual que no se puede comparar Bajo la Misma Estrella con este libro, tampoco se puede comparar el John Green de Buscando a Alaska con el John Green de Bajo la Misma Estrella, pero creo que es un autor capaz de pensar en otras ideas y no quedarse en modo sedentario en un mismo proceso. Otra de las cosas que no me han gustado demasiado ha sido ese final. En realidad, no lo he entendido porque, si creas una segunda parte tan repetitiva, con la misión de buscar el porqué de haber ocurrido ese cambio en sus vidas, terminar de esa manera el libro ha sido, para mí, marear la perdiz sin sentido alguno. Es un final inconcluso, con el cual me he quedado con ganas de saber más o, la menos, la verdad completa y creo que, tanto el lector como los propios personajes, se lo merecían.

La pluma de John Green en Buscando a Alaska es muy diferente a lo que, yo al menos, probé por primera vez, pero sigue teniendo ese estilo que tanto gusta, aunque no tan marcado. Son sus comienzos y no se ve tan plenamente, pero sigue dando y poniendo en los diálogos momentos cómicos muy sarcásticos que a mi me han encantado. Las frases para pensar no se las deja en casa, sino que siguen saliendo para dejarnos con una agradable sensación y para abrirnos bien los ojos sobre ciertos temas, como es aquí la vida y lo que viene después. Tiene una prosa especial y sencilla, muy fácil de seguir y saborear con la que, de nuevo, vamos a ser capaces de disfrutar de la inteligencia de este señor.

En cuanto a los personajes, si que es cierto que no están del todo completos, que le han faltado un poco más de profundidad, pero ha sabido crearlos. Miles, como he señalado antes, es un chico con un hobbie muy curioso, como es el intentar conocer las últimas frases de gente importante en la historia. Es un chico que necesita salir de la bola de cristal que se ha creado en su casa y vida diaria por lo que, sin casi apenas tener miedo, se va a vivir como él quiere hacerlo. Es un chico que ha ido careciendo a medida que la historia ha ido avanzando y eso me ha gustado, ya que lo hace un personaje entrañable que con el que es fácil empatizar y llevarse bien. El Coronel es un chico nervioso, que quiere llevarlo todo siempre para adelante y ayudar a todos sus amigos. Es él quien le va a enseñar a Miles la mayoría de las cosas, aunque sean malas, y se convertirá en alguien muy importante en su vida. Se trata de una persona a la cual le gustan los riesgos, por lo que no le importará hacer cosas que podrían meterle en líos. Y después de que pase ese cambio, se convierte en alguien más atrapado en sí mismo, echándose las culpas casi todos los días y obsesionado por averiguar que es lo que ha pasado en realidad. Después está Alaska, una chica que confunde a más de una persona. Tiene un carácter extraño, comportándose como si nada le diese igual aunque en el fondo está bastante destrozada. Es como el alma del grupo, la que hace que todo funcione en el internado, la que le da un porqué a las acciones que el grupo hace y la que planea cosas nuevas. Me ha encantado Alaska, es la que más se puede conocer, y es por ello por lo que he sabido comprenderla.

Buscando a Alaska es, por tanto, un libro que habla de la amistad, de las nuevas experiencias, del dolor, de levantarse tras la caída y de encontrar de nuevo el camino de la vida, con unos personajes con los que te sientes como una más y una pluma que consigue que la lectura sea lo suficientemente entretenida como para que no dejes el libro de lado. John Green vuelve a la carga, aunque sea con una historia que escribió muchos años, para conquistar de nuevo tu estantería y dejar el claro mensaje que él no es solo Bajo la Misma Estrella, sino que trae consigo otra de esas historias que te acompañarán durante mucho tiempo.

    

¡Muchas gracias a Nube de Tinta por el envío del ejemplar!