Reseña 'El Juego de Ender' de Orson Scott Card

¡Nueva reseña! El Juego de Ender es un libro al que le tenía unas ganas enormes. Siempre me ha gustado el género de la ciencia ficción y, en cuanto leí su sinopsis, no dudé en añadirlo a mi lista de libros que debería leer. Además, he leído un montón de buenas críticas, así que los motivos sobran. Llena de acción, inteligencia y moral, tengo que decir, una vez leído, que El Juego de Ender es un libro que ningún fan del género puede perderse. ¡Os dejo la Sinopsis!

La Tierra se ve amenazada por una especie extraterrestre de insectos, seres que se comunica telepáticamente y que se consideran totalmente distintos de los humanos, a los que quieren destruir. Para vencerlos, la humanidad necesita un genio militar, y por ello se permite el nacimiento de Ender, que es el tercer hijo de una pareja en un mundo que ha limitado estrictamente a dos el número de descendientes.

Ender nace para ser entrenado en una estación espacial después de que su hermana mayor y su sádico hermano Peter hayan sido declarados no aptos. Los jóvenes se distribuyen en grupos que compiten entre sí, en gravedad cero, con armas que paralizan sus armaduras. Ender asciende rápidamente en la jerarquía de la estación y se convierte en un líder nato, en la persona capaz de dirigir a las flotas terrestres contra los insectos de otros mundos.

La verdad es que Orson Scott Card me ha sorprendido y gustado muchísimo. En todo momento se ve cómo entiende de cada cosa que escribe, ya sea política, psicología, historia... lo maneja a la perfección y con ello ha logrado crear una obra que coge un poco de cada una de esas cosas para crear un cóctel de conocimientos, convirtiéndola en una novela completísima en todos los temas humanos. Ha sabido muy bien cómo reproducir un mundo futurista, imaginando y describiendo objetos y lugares -o los constantes juegos de entrenamientos y las tácticas, las cuales me han parecido maravillosos- con mucho detalle, precisión y gran facilidad, consiguiendo con ello que puedas meterte de lleno en la historia que narra y no te sientas nunca fuera de lugar.

Algo que me ha gustado ha sido las conversaciones que te encontrabas al inicio de cada capítulo, pues así es cómo hemos podido entender y conocer mejor los planes de la Flota Internacional o como pensaban en todo momento sobre lo que iba haciendo nuestro protagonista. Otra cosa que le agradezco mucho a Orson es que recordara cada dos por tres las edades de los protagonistas, pues los niños de El Juego de Ender no son los que normalmente nos podemos encontrar en los demás libros. Al tener que ser usados con un único propósito, deben prepararse para ello, por lo que deben dejar atrás su infancia para volverse más inteligentes y capacitados para cuando llegue el momento. Es tal su conocimiento, que cuando lees, te estás imaginando a una persona adulta, ya que hablan de cosas y lo dicen de una manera tan madura, que para un niño a esa edad es impensable y, si no fuera por ese detalle, lo hubiera olvidado completamente.

El Juego de Ender nos cuenta la historia de Ender Wiggin, un niño superdotado el cual pronto es llamado para que ingrese en la Escuela de Batalla, lugar creado para que niños como Ender se empiecen a formar y llegar a ser útiles para la Flota Internacional, una unidad militar cuyo objetivo es defender la tierra de la invasión de los Insectores. Con tan solo seis años, Ender tiene que aprender estrategias de combate, pensar en cómo superar los obstáculos que le van saliendo y soportar cosas que solamente debería aguantar un adulto. Demostrando una gran capacidad para superar con éxito cualquier situación, no tarda en llegar a ser uno de los reclutas más valiosos que la FI pueda tener, convirtiéndose así en el futuro líder de la guerra contra los Insectores. Junto a sus amigos, tendrá que trazar estrategias que consigan la victoria de la humanidad sobre el peligro de los Insectores y conseguir aniquilar, para siempre, la amenaza con la que llevan viviendo demasiados años.

Es difícil describir a Ender, puesto que es un personaje único y, si no es el único, hay muy pocos como él. Decir que se ha convertido en uno de mis personajes preferidos porque, a pesar de ser un niño, lo sabe todo, es decir, sabe cuando están jugando con él, se da cuenta de las cosas antes que nadie y llega un momento en el que es él quien les hace creer a los demás que sigue estando bajo su poder cuando no es así. Como se ha tenido que entrenar para la ocasión de ser llamado por la FI desde pequeño, apenas ha tenido infancia y, lo que ha vivido de pequeño, ha estado muy condicionado por su hermano Peter, un personaje bastante sádico quien no tenía ningún problema de amenazar a muerte a Ender o de hacerle daño. Eso siempre ha estado con él y es lo que ha provocado que en ocasiones haya sido muy violento con aquellos que querían hacerle su existencia imposible, ya que no quería volver a pasar por ello. Pero después tenía a su hermana Valentine y le salía esa calma que tiene arrinconada con la que podía disipar toda la rabia que guardaba.

Hay muchísimos personajes secundarios y cada uno de ellos aporta algo, tanto para la historia como para Ender. Los que más me han gustado han sido los amigos que Ender poco a poco se ha ido ganando, como Petra, la única chica recluta que sale y la cuál es magnífica en puntería o Bean, del que se podría decir que es muy parecido a Ender por su forma de pensar en las cosas durante los entrenamientos o la batalla. Valentine, la hermana de Ender, me ha encantado. Es un personaje con un carácter valiente, revolucionario y que sabe muy bien en que lugar se encuentra con respecto a su hermano Peter. Es el punto de apoyo de Ender, si no fuera por ella, probablemente Ender hubiera acabado tan majara como Peter. Y me ha gustado mucho la conexión de ambos, como se equilibran el uno al otro.

Puede que El Juego de Ender esté considerado como una de las novelas más importantes de la ciencia ficción, pero no se libra de sus contras. Los primeros capítulos se me han hecho lentos, creo que Orson ha perdido algo de tiempo intentando que conozcamos a la perfección a Ender y a su vida antes de viajar hacia la Escuela de Batalla. Eso ha provocado que todo vaya muy deprisa en los capítulos finales. Otro de los problemas está justo ahí, al ir deprisa al principio, no se le ha sacado más provecho a la batalla del final y se ha quedado también como algo precipitado. Me hubiera gustado que Orson le hubiera sacado esa chicha que todavía le queda por dar y no que todo haya sucedido de forma en la que ni siquiera estás consciente de lo que está sucediendo. Por último, decir que he tenido la obligación de releerme el contenido en muchas ocasiones para poder enterarme bien, pues son tantos los conceptos que da que, si no tienes conocimientos del tema, te cuesta entenderlo a la primera.

¿Recomendaría El Juego de Ender? Sin dudarlo, aunque solo a aquellos que conozcan bien este género ya que, si no te agrada, es posible que abandones el libro a los cinco capítulos. Es un libro que se cierra cuando se debe hacer y no alargar la historia más de lo necesario, así que yo, por el momento, no tengo intención de leer los siguientes libros.