Mini reseña 'Una canción de muy lejos' de A.F. Harrold

¡Hola ciudadanos! ¿Cómo estáis pasando este fin de semana? Espero que mejor que yo, que arrastro un resfriado que no me deja muy tranquila *llora*. Al menos sí que me deja leer, así que en el día de hoy vengo con una nueva reseña, un libro que leí en menos de un día pero que, sin embargo, voy a olvidar fácilmente. Os hablo de Una canción de muy lejos de A.F. Harrold, un autor muy conocido dentro del género middle grade que vuelve a aterrizar en nuestro país con una historia de la que, sinceramente, esperaba más. ¡Vamos con mi opinión!

Título: Una canción de muy lejos

Título original: Tha Song from Somewhere else

Trilogía/Saga: No

Autor/a: A.F. Harrold

Editorial: Blackie Books

Páginas: 230

Precio: 16'90€

ISBN: 9788417552169

SINOPSIS: 

NICK tiene un secreto. En el sótano de su casa suena una canción misteriosa. Y es mejor que nadie sepa de dónde sale esa música. Cada día en clase ve a FRANK, una niña que también tiene un secreto. Se siente sola, pero no quiere contárselo a nadie. Una tarde, Nick descubrirá el secreto de Frank. Y ella, el de Nick. Pero todos los secretos entrañan peligros: en ese sótano hay ventanas que dan a otros mundos y seres que desean atravesarlas. Y solo Nick y Frank pueden detenerlos.

Frank no sabe cómo sentirse cuando Nick Underbridge la rescata de los matones una tarde. Para Frank, ser el blanco de las burlas, los insultos, e incluso la violencia de Noble, es algo normal día a día, por desgracia. Ya sea en el colegio como en el parque que hay al lado de su casa, él está ahí para hacerle la vida imposible. Justamente es en el parque donde, tras haber desaparecido su gatos y estar buscándolo desesperadamente, donde Noble, junto a sus secuaces, aprovechan la oportunidad de la soledad de Frank para volver a incordiarla. Hasta que llega Nick.

A nadie le gusta Nick. Es grande, es raro y huele, o eso piensan todos los de la clase de Frank. Y sin embargo, hay algo bueno en la casa de Nick. Al principio, hay una música extraña tocando allí, en el sótano, un sonido que, parece ser, nadie más que ella escucha de manera misteriosa. Cuando suena, Frank se siente ligera y buena, se siente feliz por primera vez en mucho tiempo. Pero tras la música hay más de lo que parece, en la casa de Nick se esconde algo que podría cambiar para siempre el mundo en el que vive Frank y, pronto, ella se da cuenta de que no es la única que guarda secretos. O la único que necesita ayuda...

Los middle grade es un género literario que siempre ha estad ahí para mí. Ya he podido saborear algunas historias creadas para los lectores más pequeños que me han sorprendido y gustado hasta el punto de decir que, a veces, los middle grade son algo más que historias para niños o niñas. Una canción de muy lejos iba a ser así, al menos, es lo que pretendía. No obstante, y como os he adelantado arriba, en esta ocasión no he conseguido conectarme con una historia que, a pesar de que tiene buenos elementos, no están bien llevados o ejecutados hasta el punto de no llegar a concluirse del todo. Igualmente, aquí debajo os dejo esos aspectos positivos y negativos que ha tenido el libro.

1- Su edición: este libro es una preciosidad. Ya te llama la atención a primera vista, una portada a la altura de las muchas ilustraciones que hay en su interior creadas por Levi Pinfold. El cuidado que ha tenido la editorial, el mimo que le ha dado, ha sido de agradecer, ha hecho que el libro sea visualmente maravilloso. Las ilustraciones van de las más claras hasta las más oscuras, algunas donde se pueden visualizar bien los aspectos que salen, otras ya adentrándose en la trama donde solo se verá un poco de algo, acompañando de manera paralela los diferentes cambios de la trama. Desde luego, han ayudado a mostrar de la mejor manea posible los diferentes escenarios y momentos del libro.

2- Lectura rápida: sí, es un libro que se lee super deprisa. La trama va avanzando con gran agilidad, sin problemas, de manera directa. La tipografía es grande también y, gracias a las ilustraciones, que algunas llegan a ocupar hasta dos páginas completas, estamos ante un claro ejemplo de libro para esos momentos en los que no tenemos tiempo y necesitamos o nos apetece leer algo light. No vas a encontrar una historia profunda, no te vas a encontrar una historia densa, para leer poco a poco. Te vas a topar con una historia que se desarrolla, a través de capítulos que no se alargan, durante siete días que, también, van a pasar rápido.

1- La historia y la parte de fantasía: recogiendo el anterior punto que os he dejado, esa ligereza ha hecho que la historia no quede bien cuajada. Primero, no me ha transmitido nada. Cuando lo empecé a leer creía que iba a estar ante una historia que me emocionara. Pero para nada. Segundo, no sé exactamente qué es lo que quería contar el autor, no sé para qué ha creado este libro. No hay ningún mensaje ni propósito. Se lee rápido, sí, pero pasa totalmente desapercibida. Al acabarlo me quedé con la misma sensación que tenía cuando lo empecé, pasando sin pena ni gloria. Ha sido un batiburrillo de ideas que tampoco se ejecutan de la mejor manera posible, algunas no terminaban de aportan nada, pegadas de manera forzada con dos grapas. Empieza el libro con una trama que parece apuntar hacia un sitio y, de repente, a mitad de la lectura, el autor cambia el registro y añade un toque de fantasía que tampoco he entendido, no se ha explicado casi nada y al cual no le he visto ningún sentido. 

2- Los personajes y el término amistad: al igual que la historia, los dos personajes principales, Frank y Nick, no han destacado. Son monigotes con algunas acciones y sentimientos, pero no hay trama donde los podamos conocer mucho mejor. Frank no me ha convencido, una niña que, vale, está asustada por la cantidad de menosprecios y maltratos que recibe por parte de un grupo de tres niños de su colegio, pero tampoco hace nada para remediarlo. No se enfrenta, no pide ayuda, se lo guarda todo. Además, hasta ella misma, en ocasiones, le hace eso a Nick. Es por eso que la amistad que hay entre ambos tampoco me la creo. Vuelve a ser extraña, una unión forzada, sin desarrollo. Creo que sucede porque así lo decide el autor, pero no hay ningún condicionante que los una realmente, se hace todo de manera precipitada.

3- Bullying: cuando un libro, sobre todo middle grade, trata de educar, de hablar de temas tabú o peliagudos que, desgraciadamente, ocurre en gran numero en nuestra realidad, tiene que hacerlo bien. Hacer reflexionar, crear consciencia. Y me gusta que el autor haya querido de alguna manera tocar ese tema, solo que tampoco ha llevado a ningún lado. Como sabéis, Frank es víctima de un acoso tremendo, incluso me ha dado rabia e impotencia ver cómo la tratan. Pero el problema ha estado cuando esa situación no se ha resuelto en absoluto. No os voy a mentir, creía que iba a ser un libro basado en la amistad por la cual Frank sale de esa presión. Pero no. El acoso sigue y sigue, como digo, Frank no hace nada. Ni ella ni los de su alrededor. Es como si el autor hubiera empezado el libro con esa idea en mente y luego la hubiera estado olvidando cada vez más y más mientras avanzaba y escribía. ¿Está bien que se traten estos temas en la literatura? ¡Por supuesto! Pero no de esta manera. Usa las letras para cambiar, para enseñar, para provocar algo dentro de esa persona que está leyendo el libro. Y éste, desgraciadamente, no cumple con ese propósito.

En definitiva, Una canción de muy lejos es un middle grade que no me ha dicho gran cosa. Una trama algo caótica, bastante superficial, donde las descripciones no ganan terreno, hacen que el libro se quede a medio desarrollar, tratando temas importantes que, desgraciadamente, tampoco funcionan en un libro donde los personajes deberían de ser el pilar fundamental.