¡Feliz Navidad a todos y a todas! ¿Qué tal? ¿Cómo os ha ido esta semana en la que he estado bastante ausente? A mí genial, he podido descansar mucho y, además, ¡me fui a Oporto tres días! Esa es otra historia, sin dudarlo, pero no sabéis lo bonito que es todo por allí. En fin, en el día de hoy os traigo una nueva reseña, la opinión de un libro que he ido leyendo poco a poco y que, en resumen, me ha gustado mucho. Se trata de El último mago de Lisa Maxwell, inicio de trilogía y novedad de Puck para diciembre, un libro con elementos muy interesantes que, estoy segura, gustará a más de uno y una. ¡Allá vamos!
Autor/a: Lisa Maxwell
Editorial: Puck
Páginas: 544
Precio: 17,50€
ISBN: 9788492918072
SINOPSIS:
Nueva York, presente: los magos viven encarcelados en Manhattan, no pueden abandonar la ciudad sin pasar por el Umbral, una barrera de magia poderosa que puede absorber la magia de cualquier mago hasta matarlo. Estrella, con una afinidad fuera de lo común, puede robar cualquier cosa que se le ponga por delante: dinero, joyas, artículos más grandes, sin ser vista en ningún momento... y también tiene el poder de congelar los segundos y circular a través del tiempo. Solo ella puede volver en 1902, donde empezó todo. Donde el último mago los condenó a un futuro sin esperanza ...
En la Nueva York actual, la magia prácticamente se ha extinguido. Las pocas personas que quedan con afinidad para ella, los llamados mageus, viven en las sombras, ocultando lo que son. Todo aquel mageus que entra en Manhattan queda atrapado por el Umbral, una barrera de energía oscura que los confina en la isla. Cruzar el Umbral significa perder sus poderes… y, a menudo, también la vida.
Estrella es una ladrona a la que han adiestrado desde niña para robar artefactos mágicos en poder de la siniestra Orden que creó el Umbral. Gracias a su habilidad innata para manipular el tiempo, es capaz de viajar al pasado para hurtar dichos artefactos antes de que la Orden se dé cuenta siquiera de su presencia. No obstante, Estrella tendrá que recurrir a todos sus años de entrenamiento para llevar a cabo una última misión: retroceder hasta 1902 para robar un antiguo libro que contiene los secretos de la Orden, y del Umbral, antes de que el mago pueda destruirlo y condenar a los mageus a un futuro sin esperanza.
Pero la vieja Nueva York es una ciudad peligrosa controlada por despiadadas bandas criminales y sociedades secretas, un mundo en el que el propio aire está cargado de magia. Allí nada es lo que parece, incluido el mago. Además, si Estrella pretende salvar su futuro, tal vez deba traicionar a todos en el pasado.
El último mago es la primera parte de una nueva trilogía de fantasía que intenta evocar esa esencia mágica que a la que tan acostumbrados estamos cuando nos sumergimos en una historia similar, con un toque original y personal de la autora que, sin dudarlo, es lo que más me ha conquistado de este primer libro. Narrado en tercera persona a través de diferentes voces, Estrella será la protagonista de esta historia, aunque no hay que dejar atrás el peso que tendrán otros personajes que se irán uniendo poco a poco para hilar, en la trama principal, sus propias historias. A través de un capítulo corto que nos sirve de introducción a todo lo que se va a desarrollar a continuación, el libro se encuentra dividido en diferentes partes que, sobre todo, vana servir de introducción de la ambientación. No obstante, ya desde el primer momento nos vamos a topar con una lectura interesante, que te atrapa poco a poco, con una magia curiosa a la que le cogerás el gusto pronto. Los primeros peligros aparecerán, mezclándose con nueva información sobre los mageus, sus hechos históricos, la situación actual, y el comienzo de la gran misión de Estrella, unos primeros capítulos que nos adentran en un mundo peligroso en el que se luchará por la supervivencia de los mageus y la magia. Mediante el toque acertado de cambiar completamente de aires que ha dado la autora, poco a poco el libro va avanzando hacia una lectura más oscura, más pensada, más estratégica, un juego entre bandas y sociedades secretas mágicas que también tienen sus propios fines que nos meterá de lleno en la lectura, una trama que irá avanzando entre momentos de más tensión, otros más pausados, sin dejar atrás los detalles que aumentarán el espacio por el que nos moveremos, enfrentándonos a nuevos nombres que es mejor evitar a la vez que más subtramas salen a la luz para cambiarlo todo, poniendo sobre la mesa y el mapa nuevos conflictos que supondrán un auténtico obstáculo, guiándonos hacia unos momentos finales que contendrán los grandes giros de la historia, revelaciones que sorprenderán y dejarán la historia bastante tocada, con incertidumbres y para nada fácil, de cara al siguiente libro.
Hay varias cosas a destacar dentro de este libro, pero voy a empezar con lo que más me ha gustado a mí: la pluma de Lisa Maxwell. Es de las mías, una prosa profunda, detallista, que va a paso lento, tomándose su tiempo, haciendo que todo se vaya cociendo a fuego lento. Ha creado un primer libro bastante denso, pero sin abrumar, sin llegar a vencerte, una lectura que ha sabido mantenerse a flote, que ha sabido racionarse entre esos momentos más descriptivos y que pueden dar la sensación de pesadez y aburrimiento, con cortes oportunos gracias a escenas de más acción y tensión. Ha sabido dosificar bien el ritmo, no ha caído en fallos, no se ha hundido. Ha hecho una labor tremenda a la hora de ambientar su libro, ha sabido dejarlo todo bien equilibrado, ha hecho que los mageus, su historia y su vida sea palpable, se note ese miedo, esa opresión. Ha añadido elementos muy acertados que han conseguir mantener el interés. Todo lo relacionado con la Orden ha sido un punto positivo, creando una sociedad que es la que hay que vencer. En muchas ocasiones, cuando estaba leyendo el libro, me daba la sensación de estar leyendo a Leigh Bardugo y su Seis de Cuervos ya que, el estilo y el aura de la historia, era la misma. Una misión principal, diferentes personajes con sus papeles, nada es lo que parece. Cada uno mueve su ficha a su placer y antojo, para su propio beneficio, nunca sabes de quién te puedes fiar. Hay segundas intenciones y, aunque me he quedado con ganas de profundizar más en algunos personajes, que se me han quedado algo rezagados, así como en la propia Orden, que tiene su peso pero no ha tenido tanto protagonismo, sé que en los siguientes libros eso se explorará mucho más.
Otra de las cosas que me han gustado ha sido eso de los viajes en el tiempo y andar por un Manhattan completamente diferente. Nos trasladamos a 1902, y esos e nota. Los detalles que hay en la ciudad evocan a la perfección una época donde los carros a caballos, el frío del río, los locales de opio, plagados de humo, los teatros, los espectáculos y las calles adoquinadas eran parte de esa esencia. Como he comentado arriba, todo ha estado muy medido: el tipo de vestimenta, las expresiones, los inventos tecnológicos de aquella época. La atmósfera de bandas, enfrentamientos y ajustes de cuentas. El meternos en ese mundo oscuro de favores, juegos clandestinos, todo ello tocado por la magia, hace que todo eso cobre un doble sentido. Y en todo momento sabía donde estaba, nunca me ha dado la sensación de estar en el presente a pesar de que es justamente así cómo comienza este libro.
Las únicas cosas negativas que voy a relucir han sido, por una parte, el tema del Umbral. no me ha quedado bien claro ese sistema. Por qué los mageus llegaban a Manhattan a pesar de estar ahí el Umbral por propia voluntad, por qué sí podían entrar pero no salir. No sé yo si es que Lisa Maxwell no lo ha terminado de cuadrar y no lo ha explicado de manera clara o he sido yo que no me he enterado de algunos aspectos y se me ha quedado algo desdibujado. Hay algunas cosas sobre el Umbral que no he terminado de entender. Y, luego, a pesar de que Estrella me ha encantado como protagonista por su caracter y dureza, a veces me ha sacado de quicio por sus acciones y decisiones, comportándose de manera muy seca y borde, algunas veces de manera inmadura. Son las dos cosas que más me han chirriado del libro.
Por todo lo demás, El último mago ha sido una primera parte que ha sabido tener su propia esencia. Una pluma maravillosa y sorprendente, un gran descubrimiento, junto a una trama bien ambientada y plagada de buenos momentos, consiguen que mi fin de año literario acabe con un buen sabor de boca, una lectura altamente recomendada que no va a decepcionar ni dejar indiferente a nadie.
¡Muchas gracias a Puck por el envío del ejemplar!
Hola! No conocía el libro y aunque parece entretenido no termina de atraerme del todo y tampoco quiero más sagas en este momento porque tengo muchas pendientes. Muchas gracias por la reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
Hello hellooooooo!
ResponderEliminarAy, de seguro tenía unas ganas enormes de que leyeras este libro jajajaj. Sabés de lo mucho que amo esta historia y afsdghfejrgt es grandiosa, eso seguro <3 Sin duda soy una gran fan de Lisa Maxwell y de su asombrosa novela por muchisimas razones que no podría ni ponerme a enumerar. Sí que es un poco confuso el libro en algunos aspectos, pero astfdygt lo adoro. SIN DUDA ES DE MIS LIBROS FAVORITOS !!!
MIL GRACIAS POR ESTA MAGNÍFICA RESEÑA, Sandra !!! ES UN PLACER VENIR A LEERTE YYYYY DELEITARME CON ESTAS PRECIOSAS FOTOS TUYAS <3
Un beso! Nos leemos :)
Y FELICES FIESTASSSSS !!!
<3 <3 <3 <3 <3 <3 <3
¡Hola! No descarto leerlo a largo plazo pero la verdad es que ahora mismo estoy buscando otro tipo de lecturas y por ahora no tengo pensado animarme con él. Un besote guapa :)
ResponderEliminarHola, hola guapa.
ResponderEliminarUyyyyy, pues pinta muy bien aunque li que has dicho de que es densa... Me da un poco de miedito porque no estoy en un punto de leer cosas densas. Pero bueno, apuntado queda!!!
Besotes desde Briathran.